de viaje ➝ La ‘espetada’, un placer para el paladar. Es uno de los platos más populares de Madeira. Una brocheta de carne de vaca sazonada con hierbas, con la particularidad de que suele servirse ensartada en un palo de laurel. Vancouver, ballenas cerca de la ciudad Gustará a todos aquellos que no quieren renunciar a la playa ni tampoco a unas vacaciones en una gran urbe. Vancouver es la quinta mejor ciudad del mundo para vivir, según la consultora Mercer, y su oferta de ocio familiar tiene mucho que ver en ello. Stanley Park, uno de los parques más grandes de Norteamérica, alberga en su interior un zoo, un acuario y la playa de Second Beach. Los atardeceres desde la playa de English Bay merecen la pena, así como el festival de fuegos artificiales que se celebra en ella a finales de julio, la Celebration of Light. ¡Ballenaaaaa! El avistamiento de ballenas es otro de los atractivos de la zona. Se contrata la salida desde la Isla de Vancouver. Hasta Victoria, en la isla y capital de la Columbia Británica, se llega cómodamente en ferri. Croacia, la costa dálmata en velero La belleza de las plazas, palacios y el Puerto Viejo de la amurallada Dubrovnik, o una escapada a las cercanas islas Elafiti, con las cristalinas aguas de la playa Sunj (en la isla Lopud) son algunos de los alicientes de este rincón del Adriático. Pero la manera más original de recorrer la costa dálmata es en velero. El precio medio del alquiler de una embarcación en verano por siete días y con patrón ronda los 800 euros por persona. Otra opción más económica es desplazarse entre las islas en ferri o taxi acuático. Al otro extremo de la isla está la playa de Saplunara, rodeada de pinos e ideal para ir con los más pequeños por la calma de sus aguas. Marco Polo vivió aquí. Aunque creció en Venecia, los lugareños de la isla Korcula sostienen que Marco Polo nació en esta isla. Incluso se puede visitar la torre de la casa que supuestamente le vio nacer. Cantabria, un mar y montaña La costa cántabra nos regala playas de gran belleza como la de Oyambre (cerca de Comillas), ubicada en el parque nacional del mismo nombre y en la que sus aguas comparten protagonismo con las dunas y las marismas que la rodean. Pero no todo es playa en Cantabria. La familia al completo puede disfrutar también de subir a los Picos de Europa en teleférico desde Fuente Dé, muy cerca de Potes, o pasar un día en el Parque de la Naturaleza de Cabárceno: 700 hectáreas que pueden recorrerse en coche y que acogen osos, jirafas, gorilas, leones, elefantes… RACC 60 junio 2015
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