DE VIAJE
k
excusa para recorrer buena parte
de las Highlands. Muchos de los
escenarios principales se sitúan en
la ciudad de Edimburgo y sus alrededores.
Sin ir más lejos, a ambos
extremos de la Royal Mile –la calle
principal del casco antiguo, famosa
por los “rascacielos medievales”
que la flanquean–, se encuentran el
castillo de Edimburgo, alzándose
sobre un imponente farallón de roca
volcánica, y el palacio de Holy–
roodhouse, residencia oficial de la
reina de Inglaterra cuando visita la
ciudad. Justo al lado se pueden ver
las ruinas de la abadía del mismo
nombre, arrasada por Enrique VII
para convencer a los escoceses de
que casaran a María Estuardo con
su hijo. Ambos aparecen en la segunda
temporada de la serie de TV,
mientras que el pueblo de Falkland
hace las veces de Inverness en la ficción.
Se sitúa en el condado de Fife,
frente a Edimburgo, tras cruzar el
fiordo de Forth, como quien dice.
Es allí donde empieza la saga. En
la misma región se ubica el castillo
de Aberdour, que en la ficción
hace de… ¡abadía de Sainte-Annede
Beaupré, en Francia!
Pero los escenarios más emblemáticos
los encontraremos en el norte,
acercándonos a la reserva de los
Cairngorms, con macizos como el
Monadhliath. Junto a ellos, crecen
los restos del Bosque Caledonio
original, en especial en la zona
de Tulloch Ghru. Y en una Ruta
Outlander por Escocia tampoco
puede faltar una visita al castillo
de Doune, el castillo de Leoch en
la tele, donde los aficionados a la
serie Juego de Tronos también reconocerán
el perfil de Winterfell
del primer episodio.
Sudáfrica
La Ruta del
Arco Iris
KRUGER
NATIONAL
PARK
CIUDAD
DEL CABO
Cabo de
Buena Esperanza
Mbabane
Santa Lucía
OCÉANO
ÍNDICO
Hermanus
Johannesburgo
Port Elizabeth
Durban
Desde avistar leones a bañarse con
tiburones blancos, sin olvidarse de
conocer a los mamíferos más grades
de la tierra, el elefante y la ballena:
Sudáfrica ofrece un poco de todo,
aderezado con unas gotas de vida
mundana. Sudáfrica tiene algo de
lo que otros destinos africanos carecen,
y es que en un mismo viaje
se puede aunar la observación de
Culross (foto superior), uno de los pueblos más bonitos de Escocia, se convirtió en
el pueblecito de Cranesmuir en la primera temporada de la serie Outlander, mientras
que el Holyrood Palace (foto inferior) también es escenario de esta serie de TV.
RACC 66 marzo 2018
JOHN LAWSON/GETTY