LOS SOCIOS NOS EXPLICAN SU EXPERIENCIA
“Tenía que ser un viaje de placer, en
agosto, una ruta en coche por Marruecos,
que nos habíamos tomado
con calma, bajando desde Barcelona,
con mi mujer y mis dos hijos, parando
dos días en Córdoba…—recuerda
Sergi Palmés, socio del RACC—. Y
todo iba muy bien hasta que al tercer
día de estancia en Chauen, me
desperté a las 5 de la madrugada con
un dolor abdominal terrible, tirado
por el suelo. Fuimos los cuatro en
taxi como pudimos hasta un hospital
de Tetuán”.
Una operación de riesgo
“Aquel trayecto fue surrealista — comenta
Sergi—. El taxista solo tenía
una pierna, el coche era automático
y yo no podía ni sentarme del dolor,
era insoportable. Realmente creía
que me moría, que no llegaba. En el
hospital me hicieron un montón de
pruebas y un día y medio más tarde
me dijeron que tenía una pancreatitis
aguda, pero sospechaban que
había algo más y me querían operar.
Fue entonces que llamamos al
RACC, yo no me quería operar en
Marruecos”.
“De hecho — reconoce Sergi— fue mi
madre quién llamó al RACC desde
Barcelona, nosotros estábamos tan
“ Eternamente
agradecidos al RACC”
LA HISTORIA DE UNA REPATRIACIÓN MÉDICA DE
URGENCIA Y DE CÓMO EL RACC MOVILIZÓ TODOS
LOS MEDIOS NECESARIOS PARA AYUDAR A UNA FAMILIA.
RACC 78 marzo 2018
JORDI PLAY